Los secretos detrás de la fermentación en depósitos de cemento

Las técnicas de vinificación han evolucionado a lo largo del tiempo, y una de las técnicas más empleadas en la actualidad es la fermentación en depósitos de cemento. Este método ha sido utilizado por muchos enólogos para producir vinos de alta calidad, pero ¿por qué es tan efectivo y cuáles son los secretos detrás de la fermentación en depósitos de cemento? Este artículo profundizará sobre el tema.

¿Qué son los depósitos de cemento y cómo funcionan?

Los depósitos de cemento son grandes tanques de almacenamiento de vino que están hechos de cemento, a diferencia de los depósitos de acero inoxidable o madera utilizados en la mayoría de las bodegas. El cemento es poroso, lo que significa que permite que el oxígeno entre en el vino mientras se fermenta. Este oxígeno es beneficioso para las levaduras que están activas durante la fermentación, ya que les proporciona el oxígeno necesario para crecer y reproducirse. Además, a diferencia del acero inoxidable, el cemento no se oxida, lo que significa que no influye en el sabor del vino.

El cemento también es excelente para mantener la temperatura, lo que es importante para mantener la fermentación a una temperatura constante. Al ser poroso, el cemento permite que el calor generado por la fermentación se disipe lentamente, manteniendo la temperatura constante en el tanque de fermentación.

¿Por qué elegir los depósitos de cemento?

Hay varias ventajas en la fermentación en depósitos de cemento. La primera de ellas es que el cemento es neutro, lo que significa que no altera el sabor del vino. Esto lo hace ideal para la fermentación de uvas de alta calidad, ya que se puede preservar el sabor único y distintivo de la uva.

Además, el cemento es un material duradero y fácil de mantener. No se oxida ni se corroe como el acero inoxidable, y no requiere mucho mantenimiento. También es resistente a los cambios de temperatura, lo que significa que los enólogos pueden controlar la temperatura de la fermentación en gran medida.

Por último, los depósitos de cemento son ideales para la fermentación espontánea. Esto se debe a que el cemento es poroso, lo que significa que las levaduras silvestres pueden penetrar a través de los poros y comenzar a fermentar el mosto, lo que puede crear un vino más complejo y lleno de sabor.

Cómo se utiliza la fermentación en depósitos de cemento

La fermentación en depósitos de cemento se lleva a cabo de la misma manera que la fermentación en otros tipos de tanques. Primero, las uvas se cosechan y se aplastan para producir el mosto. El mosto se transfiere a los depósitos de cemento, donde se añade levadura para comenzar la fermentación.

Durante la fermentación, la levadura consume el azúcar en el mosto y lo convierte en alcohol. El oxígeno del aire penetra en el vino a través de los poros del cemento, lo que ayuda a las levaduras a crecer y prosperar. La temperatura se mantiene constante en el depósito de cemento, lo que garantiza que la fermentación se lleve a cabo de la manera más efectiva posible.

Una vez que se completa la fermentación, el vino se deja macerar en los depósitos de cemento durante varios días u semanas para que los sabores se integren y los taninos se suavicen. El vino se separa luego del residuo, y se transfiere a barricas de madera para que continue su maduración.

Conclusiones

La fermentación en depósitos de cemento es una técnica creciente en la producción de vino. Es ideal para la fermentación de uvas de alta calidad, ya que el cemento es poroso, lo que permite que el oxígeno penetre en el vino para ayudar a las levaduras a crecer y prosperar. Además, los depósitos de cemento son neutros, lo que significa que no influyen en el sabor del vino.

Esperamos que este artículo haya sido esclarecedor para ti si eres un/a amante y experto/a en vinos. La fermentación en depósitos de cemento es una técnica que vale la pena considerar si se trata de obtener vinos de alta calidad con todos los matices que las uvas pueden aportar.